¿Es conveniente que ahora digan que Hítler era homosexual de closet y pedófilo? La respuesta es NO, o depende del ángulo que lo quieras ver, y es que es muy conveniente recordarles a los actuales alemanes homofóbicos que todas las normas que siguen para denigrarnos vienen de un homvimiento que fue comandado por alguien homosexual, aunque si el ángulo para ver este tema es el LGBT ¿quién querría que en la actualidad se nos involucrara con un personaje tan aberrante como Hitler?
La verdad es que durante décadas nadie pareció importante investigar lo que se decía en las memorias de un antiguo nazi, Eugen Dollmann, publicadas en un libro en el cual aseguró que Hitler era homosexual.
Imagínense en esa época a la devastada Alemania de posguerra, país que podía sobrellevar el peso de haber seguido a un genocida, pero no el baldón de haberse dejado guiar por alguien al que la opinión pública habría calificado casi unánimemente de pervertido sexual.
Sin duda, las pruebas de la homosexualidad de Hitler eran abundantes y durante los años 20 y 30 estuvieron al alcance de docenas de personas quienes describían la relación homosexual que Hitler mantuvo durante la primera guerra mundial con su compañero de armas Ernst Schmidt.
Aún más reveladora fue la colección de declaraciones recogidas por la policía anti-vicio en las que multitud de jovencitos prostituidos dejaron constancia de cómo Hitler iba a buscarlos para invitarlos a comer, llevarlos a su casa y acostarse con ellos.