Turkmenistán es uno de aquellos países que deseamos se trataran de una mala broma, pero desafortunadamente es tan real como sus castigos contra la comunidad LGBT.
Según el artículo 135 de su Código Penal, el sexo entre dos personas del mismo sexo es castigado hasta con dos años de prisión y si la “ofensa” se repite, el castigo puede prolongarse hasta por diez años.
Estás medidas ponen a Turkmenistán como uno de los dos países en Asia Central que aún consideran la homosexualidad como un delito.
Hace unos días, un Tribunal local condenó a un conocido actor gay -en aquel país-, a su esposo y a varios otros a dos años de prisión por cargos de sodomía.
El número total de hombres que fueron arrestados no está claro (aunque algunos medios han informado que podrían tratarse de hasta una docena). Según Turkmennews.com, algunos fueron liberados después de que supuestamente sobornaron a la policía o llegaron a un acuerdo para testificar contra otros como testigos.
Según los informes, aunque el actor en cuestión es hijo de un diplomático, él no logró obtener la libertad a través del soborno o las conexiones familiares.
Este incidente es el más reciente de una serie de historias aterradoras que han sucedido en Turkmenistán. El mes pasado, la policía golpeó a un hombre gay de 23 años por ser gay y VIH positivo. Pink News informó que el hombre estaba estudiando en Rusia cuando fue deportado a Turkmenistán debido a su estado de VIH, debido a la ley del país que obliga a los ciudadanos extranjeros que viven con el VIH a regresar a sus países de origen.
El joven fue arrestado más tarde en Turkmenistán después de intentar acceder al tratamiento contra el VIH y golpeado por la policía cuando descubrieron su estado. Finalmente huyó a Rusia y pudo buscar refugio en un país europeo no especificado, gracias a la asistencia de una organización LGBTQ + no especificada.
El año pasado, un hombre gay llamado Kasymberdy Garayev desapareció en Turkmenistán después de publicar un video emocional dirigido a su familia implorándoles que lo «perdonaran» si era «llevado a la fuerza».