Barcelona de los años 30, un ambiente LGBT+ nada que ver con el actual. Todo era más lúgubre y oculto, «Muy rollito gángster», describe Ramón Martínez, un filólogo que radica en Madrid, y que nos cuenta por twitter historias de personajes importantes en la comunidad con el hashtag #MariconesDeAntaño
Bueno, sodomitas de mi amor, hoy voy a contaros una historia apasionante que sucedió en la#Barcelona de los años '30, y mezcla a #LasCarolinas, que os van a encantar muchérrimo, con #FlorDeOtoño, que fue el más…. «revoltoso» de los #MariconesDeAntaño, y era este señor: pic.twitter.com/iBwCZu4vpm
— 💐 Ramón Martínez 🌾 (@ramonmartz) April 30, 2018
Ramón narra en su hilo de tweets, la historia de un bar llamado «La criolla» donde, según sus palabras, se reunía gente de todo tipo, desde marineros y delincuentes hasta #GenteDeBien buscando diversión…. y se añadían muchos varones gais que también buscaban lo suyo….
Con frecuencia, acudía a este lugar Lluís Serracant, a quien apodaban «Flor de Otoño», Un abogado,… que defendía a muchos delincuentes y anarquistas, porque compartía sus ideas para hacer la revolución además por las noches solía actuar travestido en el Bataclán, que era una sala de fiestas en plan cabaret. De ahí le venía el sobrenombre de «Flor de Otoño»
Según el filólogo, la historia de este personaje, sirvió para que años después se hiciera una obra de teatro, y una peli basada en la vida de Lluís Serracant y en sus aventuras como travesti…
Esta historia la conocemos gracias a Jean Genet (1910-1986), que nos la cuenta en su «Diario de un ladrón» (1949), un libro que recoge sus peripecias en la Barcelona de los años treinta donde se prostituía y robaba carteras. Era este señor: pic.twitter.com/AlNTA2lcE4
— 💐 Ramón Martínez 🌾 (@ramonmartz) April 30, 2018
Ramón Martínez sigue narrando la historia de este gran personaje, buscando darle nombre entre losa activistas, ya que después de que una bomba desapareciera un urinario público, el sitio preferido para ligar entre personas del mismo sexo, «Flor de Otoño» y miembros de «La criolla» marcharon como acto de protesta.
Esta es una historia sintetizada, por ello, si quieres leer más a detalle sin perderte las bromas que hace Ramón al respecto, te invitamos a que preciones Aquí para leer toda la leyenda completa