No queremos ser prejuiciosos sin embargo, existen perfiles en Grindr que lejos de ayudarte a pasar un buen momento o ayudarte a tener una tarde genial, pueden arruinarte cualquier buena percepción que tengas de la aplicación, por ello te pedimos evitar aquellos que:
1 – Los que buscan algo casual: en inglés lo llaman NSA («No Strings Attached») y son los que no quieren conocer gente con la que entablar una relación, sino que únicamente están interesados en el sexo. Si lo que buscas tú es algo más que sexo no caigas en sus redes. Si tú solo buscas sexo, pues adelante, pero ten cuidado porque algunos solo buscan a alguien con quien ponerle los cuernos a sus parejas.
2 – Dicen en su perfil: No afeminados: la plumofobia como le dicen en España es una plaga en Grindr y la comunidad gay, así que deberías evitar siempre y en todo momento a los que solo buscan machotes y rechazan «plumas» y «locas» y demás calificativos. Esos gays que solo quieren machotes musculados y tienen que reafirmar su masculinidad en todo momento son tremendamente tóxicos. Huye de quien discrimine a los demás.
3 – El obsesivo: seguro que te has encontrado con algún gay en Grindr que parece un tanto desesperado. Son los que te escriben y si no les contestas al instante se indignan o te insultas, o los que te dejan 12 mensajes buscando tu interés aunque a ti no te interese lo más mínimo y se lo has intentado explicar educadamente. Si alguien no te interesa, sé educado y díselo con tacto, pero tampoco toleres a esos tíos obsesivos y plastas.
4 – El que va demasiado deprisa: frente a los que buscan algo informal y casual están los que buscan pareja. Y a veces la buscan con tanta fuerza que después de chatear un rato ya cree que eres el hombre de su vida, que os vais a casar y que os vais a vivir juntos. A ver, intercambiar 10 mensajes en Grindr no es encontrar el amor perfecto. Cuidado con este tipo de gays en Grindr, que pueden llegar a convertirse en stalkers.
5 – El de las drogas: no te drogues, las drogas son malas y lo sabes. Aquellos usuarios que buscan chemsex o «porros y pajas» nunca son recomendables. Además muchas veces estos gays quieren conseguir drogas por su cara bonita. Peligro.
6 – El turista: es una práctica muy común entre los gays lo de abrir Grindr cuando vas de viaje. Pero no te conviene quedar con gente que está de paso si lo que buscas es tener algo más que un rato de diversión sin ataduras. Y últimamente habrás visto que hay gente que dice estar de paso… ¡y no lo está! Lo dicen solo porque los turistas triunfan en las apps gays. Que no te mientan.
7 – La estrellita: hay gays que tienen Grindr solo para promocionar sus redes sociales y sumar seguidores a su cuenta de Instagram. Estos aspirantes a celebrities e influencers no te convienen ni a ti ni a nadie. Para ellos eres un grano más en la montaña de arena que necesita para escalar hasta los 10.000 seguidores. Huye.