Adam Rippon es un patinador sobre hielo de 28 años de edad que se destapó como el primer atleta abiertamente gay en participar en los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeongchang, los cuales se realizarán del 9 al 25 de febrero. El entusiasmo sobre su participación y representación de las personas LGBT lo llevó a opinar sobre Mike Pence, vicepresidente de Estados Unidos, quien es reconocido por sus posturas en contra de las personas LGBT.
Luego de que en una entrevista un reportero cuestionara a Rippon sobre su opinión acerca de la participación de Mike Pence en los Juegos Olímpicos de Invierno, ya que éste encabezará a la Delegación Olímpica de Estados Unidos; el atleta mostró su indignación y rechazo debido a la ideología en contra de los derechos de las personas de la diversidad sexual del republicano.
“¿Te refieres a Mike Pence, el mismo Mike Pence que financió las terapias reparadoras para los homosexuales? No creo que tenga un concepto de la realidad. Hacer caso a algunas de las cosas que Donald Trump ha dicho y que Mike Pence diga que es un devoto cristiano es completamente contradictorio.”
“Si él está de acuerdo con lo que se dice sobre las personas, los estadounidense, los extranjeros, sobre diferentes países y toda esa mierda, creo que debería ir a la iglesia… Es alguien que no solo no tienen ningún amigo gay, sino que además piensa que soy un enfermo”, agregó el patinador.
Tras las afirmaciones del joven atleta, Alyssa Farah, secretaria de Prensa de Mike Pence, calificó las palabras de Rippon como “falsas”; además, señaló que las declaraciones “carecían de fundamento”.
Este lunes, Rippon declaró que la rápida respuesta del equipo de Pence lo sorprendió, y dijo estar contento de que sus preocupaciones como atleta y ciudadano estadounidense se hicieran escuchar.
Adam enfatizó en que no está interesado en conocer a Pence durante el encuentro tradicional entre funcionarios de la delegación y los atletas; no obstante, señaló que no quiere emprender una pelea con el republicano sino concentrase en su desempeño atlético para destacar en los Juegos Olímpicos.
“Salir y ser visible puede ayudar a que el viaje sea mucho más fácil para otra persona. Cuando era muy joven, ser de un pueblo pequeño era un desafío. No tenía ningún modelo a seguir. No tenía a quien admirar… Es parte de lo que soy”, declaró el joven atleta.
Mike Pence es un político republicano abiertamente evangélico que ha mostrado su oposición a los derechos de las personas LGBT, rechazo que se basa en gran parte en su afinidad con la religión.
El también exgobernador del estado de Indiana desató polémica cuando en 2015 aprobó la Ley de Restauración de la libertad Religiosa, la cual permite a las empresas de Indiana discriminar a las personas por su orientación sexual e identidad de género. La norma permite que la negación de servicios a las personas LGBT sea sustentada por la religión que profesen los prestadores de servicios.
“El Congreso debe oponerse a cualquier esfuerzo destinado a colocar las relaciones homosexuales y lesbianas en una situación jurídica de igualdad con el matrimonio heterosexual”, señala Pence en una declaración para su página web creada en el año 2000 con motivo de su candidatura rumbo a la Cámara de Representantes.
En dicha publicación, Pence asegura que el Congreso debe financiar “instituciones que proporcionan asistencia a los que tratan de cambiar su comportamiento sexual”.
Cabe destacar que el político nunca se ha retractado de sus dichos.
Nota original de Desastre mx