La multiplicidad de identidades y los cambios sociales y culturales han llevado a que cada vez más personas exijan que sus maneras de identificación sean reconocidas, por ello es común que en los últimos años observemos una gran cantidad de variantes del acrónimo LGBTIQ+.
Recientemente, Gay Uk, una revista británica con contenido dirigido a las personas de la diversidad sexual y de género, reportó la inquietud de diversos grupos en los que se debate la inclusión de la letra K en referencia al término kink, una palabra anglosajona utilizada para referirse a personas que tiene prácticas sexuales inusuales o no normativas.
Este tipo de sexualidad incluye los denominados fetiches y guarda relación con prácticas sadomasoquistas y otras poco convencionales. El acrónimo LGBT ha sumado letras desde la década de los 90. Esto surge a partir de la necesidad de alejarse de la limitada idea de “comunidad gay” y de la exclusión de otras identidades y sexualidades.
Debido a la suma de las luchas de diversas identidades, el acrónimo de la diversidad sexual y de género, según reportó la publicación, podría quedar de la siguiente manera: LGBTQQICAPF2K+. Cada una de las letras representa: lesbiana, gay, bisexual, transgénero, transexual, travesti, queer, questioning (cuestionador), intersexual, curioso, asexual, agénero, aliado, pansexual, polisexual, amigos y familia, dos espíritus, kink y más.
Claire Heuchan, una feminista radical, bloggera y autora del libro “Sister Outsider” comentó: “Las personas con problemas (refiriéndose a aquellas que se definen como kink) no pueden pertenecer al acrónimo LGBT pues ellas no se enfrentan a ninguna discriminación estructural o sistémica como resultado de sus inclinaciones sexuales”.
en Quora, una red social en la que los usuarios hacen preguntas y otros responden a ellas.
Así mismo, usuarios de Twitter comentaron que la adición de la letra “K” en el acrónimo LGBT+ resulta “completamente ridículo”.