La Copa del Mundo de 2022 llegará a Qatar dentro de unos años y, como nación asiática anfitriona de este torneo, ha vuelto a ser objeto de críticas por sus opiniones sobre la diversidad sexual. Preguntarse sobre el trato que reciben las personas con estilos de vida diferentes durante eventos como las competiciones deportivas es una parte esencial si se quiere involucrar a otras personas de fuera de la propia cultura, lo cual tiene sentido si se tiene en cuenta que los partidos de fútbol no sólo se juegan dentro de las fronteras, sino también entre equipos.
«Nosotros respetamos todas las culturas, así que otros países deberían hacer lo mismo», dijo el jefe del Comité Organizador del Mundial de Qatar.