¡Lo confesamos! Amamos dar este tipo de noticias, más si están sucediendo en nuestro país, y es que esta historia que inició como un matrimonio legal y pasó a varios contratiempos con la intervención del director del Registro Civil de Nuevo León, Fernando Marín, y sus declaraciones donde advertía que no podía realizarse ante la falta de una notificación del Congreso local.
Deben saber que, siguiendo órdenes de su superior, los trabajadores de la Oficialía Número 1 de San Nicolás les negaron el derecho a la pareja, quienes junto con sus compañeros argumentaban que ese documento no era necesario ya que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) había señalado que la medida entró en vigor desde el mes pasado.
El colectivo LGBT que acompañó a las novias instaló un plantón dentro de las instalaciones de la Oficialía hasta que el trámite procedió.
“No es una cuestión nada más de pose, son tantos años de decirnos que sí y nada, son tantos años de compromisos, incluso firmados. No es personal, es un asunto institucional”, dijo uno de los manifestantes integrante del colectivo Movimiento por la Igualdad en Nuevo León, quienes amagaron con quedarse en el registro civil hasta que abriera a las 08:00 horas de hoy.
Al final, la pareja logró el cometido y volvió su historia de amor ¡en el inicio de una historia pública de derechos para la comunidad LGBT!