Parece increíble que a más de un año de ser inaugurado, el Centro de Atención Médica y Psicológica para Personas Trans (CAMPPT) en la Unidad de Especialidades Médicas (UEM) del Hospital General de Cuernavaca José G. Parres permanezca cerrada debido a que la administración pasada no la proveyó de insumos necesarios para su funcionamiento; así lo denunció Alejandra Flores Espinoza, diputada del Congreso local por morena.
En las instalaciones de la clínica, inaugurada por la entonces secretaria de salud del gobierno de Graco Ramírez, Patricia Mora González, se atendían a personas transgénero en materia psicológica y se les otorgaban tratamientos hormonales para la transición de género, así como servicios de salud general de frente a la fuerte discriminación que padecen las personas trans en los servicios de salud. “Se tiene registro de algunos casos en los que hombres y mujeres asistieron a dicho consultorio para iniciar tratamientos hormonales, pero al dejarlos repentinamente podrían presentar daños a la salud”, indicó la diputada, la cual explicó que desde el Congreso se buscara que se vuelva a poner en marcha.
La legisladora explicó que activistas defensores de los derechos humanos, personas de la comunidad transgénero y las autoridades en materia de Salud del estado se reunirán para conversar sobre las necesidades y prioridades de la población trans en el acceso a los servicios de salud. Además, explicó que Marco Cantú Cuevas, titular de la Secretaría de Salud, se comprometió para que la clínica sea reactivada y los pacientes transgénero que se encontraban en tratamiento no se queden en el olvido ni sufran consecuencias en su estado de salud.
