La respuesta es ¡bien por ellas! Pero es indignante que hasta para vivir con nuestro amor en aquel lejano país tenga que intervenir la justicia ¡ y más si es tu propia familia quien decide que están mal! ¿Se imaginan que esto pasara en México y que por ser homosexuales nuestras familias quisieran internarnos en un manicomio? El caso es fuerte y la pelea continua.
Es un gran paso que la división de dos jueces del Alto Tribunal de Kerala, Estado al sur de India, diera el consentimiento legal para que dos mujeres lesbianas vivan juntas porque gracias a este hecho sin precedente existirá (al menos de manera conyugal) la posibilidad de que homosexuales puedan vivir una vida en pareja bajo el mismo techo.
La decisión de los magistrados, emitida este lunes, es un hito en India, donde muchas parejas tienen dificultades para vivir bajo el mismo techo sin estar casadas, y constituye el espaldarazo legal definitivo a la histórica decisión tomada por la Corte Suprema a comienzos de mes, que anulaba la norma colonial por la que se perseguía la homosexualidad desde hacía más de 150 años.
Ahora seamos serios con esta parte de la historia, y es que el 12 de septiembre, Sreeja S, de 40 años, presentó un recurso ante el Tribunal Superior de Kerala en el que alegaba que su compañera, de 24 años, había sido secuestrada por sus padres. Un mes antes, la más joven fue detenida por la policía a raíz de una denuncia interpuesta por su madre después de que mudarse a vivir con su pareja, con la que tiene una relación desde hace dos años, en el el distrito de Kollam; a 40 kilómetros al norte de la capital de Estado, Thiruvananthapuram. Tras el arresto, un juzgado local puso en libertad a la joven, que fue secuestrada por miembros de su propia familia y llevada a un centro psiquiátrico de la capital.