La Civil Aviation Authority autoriza a un aspirante a piloto comercial con VIH a que pueda completar su formación y obtener el certificado sanitario clase 1, indispensable para obtener su título, que no se extiende a los seropositivos.
Originario de Glasgow, Escocia, un aspirante a piloto comercial, que prefiere permanecer anónimo, inició su entretenimiento con EasyJet tras superar las pruebas iniciales, hasta que le advirtieron que la Autoridad de Aviación Civil (CAA por sus siglas en inglés: Civil Aviation Authority) no le proporcionaría el certificado médico clase 1, imprescindible para pilotos comerciales, porque es VIH positivo. Un año después de denunciar su situación, este jueves, 18 de enero, el Secretario de Transporte, Chris Grayling, anuncia en la Cámara de los Comunes del Reino Unido que la CAA ha decidido hacer una excepción en su caso, estudiando una rectificación permanente en su reglamento a largo plazo.
“En relación con el VIH, hemos presentado informes a la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA por sus siglas en inglés: European Aviation Safety Agency), que es el órgano rector responsable de los estándares médicos, y les pedimos que se revisaran las reglamentaciones necesarias e investigación asociada sin demora, que esperamos conduzca a un cambio permanente en la normativa actual. Reconocemos que esta investigación llevará tiempo y continuaremos ofreciendo todo nuestro apoyo a este trabajo de cualquier manera que podamos. Mientras tanto, la CAA emitirá certificados médicos iniciales de clase 1 con una restricción a las operaciones multipiloto a los solicitantes que deseen convertirse en pilotos comerciales, sujeto a que los solicitantes pasen su evaluación médica de primera clase”, declaró Andrew Haines, director ejecutivo de la CAA, al anunciar la rectificación de esta medida.
“Estoy absolutamente entusiasmado de que hayan podido actuar tan rápido para dar una solución a corto plazo y comprometerse con la modificación del reglamento a largo plazo (…). Cuando fui diagnosticado con VIH por primera vez, la gente se empeña en decirte que el VIH no debería ser una barrera para que hagas lo que quieras, pero para mí lo fue. Durante mucho tiempo he estado pensando que el VIH es una barrera para la forma en que quiero vivir mi sueño, pero debido a este cambio en la normativa, la barrera se ha ido y el sueño se puede perseguir”, declara el aspirante, de 29 años de edad, que planea cumplir con su entrenamiento lo antes posible, aunque sólo podrá acceder al certificado sanitario con restricción de «operaciones multipiloto», lo que significa que sólo podrá volar con otro piloto en cabina.
En cualquier caso, al aspirante de Glasgow no le va a costar mucho trabajo superar todas las pruebas dado que lleva volando desde los 15 años, obteniendo su licencia de piloto privado 2 años después, antes incluso de sacarse la licencia de conducir. Hace cuatro años le diagnosticaron que es VIH positivo y hace un año decidió dar el paso para obtener la titulación para ser piloto comercial, quedando devastado al descubrir que la normativa no le permite obtener el certificado sanitario indispensable para obtener su título. “Hoy las reglas están siendo cambiadas. Aunque no puedo dar un determinado resultado a un caso individual, esto significará que las personas que sufren de condiciones que les dificultan convertirse en pilotos comerciales encontrarán que es más fácil hacerlo. Creo que la Autoridad de Aviación Civil está tomando un enfoque más sensato sobre este asunto”, declara Grayling.
“Son enfermedades que la Administración entiende que si las tienes no puedes optar a ese puesto de trabajo (…). Esa exclusión genérica es inconstitucional porque afecta al principio de igualdad del artículo 14 de la Constitución”, explica el director de la Cátedra de la Universidad de Alcalá de Henares sobre Discapacidad, Enfermedad crónica y Accesibilidad a los derechos, Miguel Ángel Ramiro. En España, las personas con VIH tampoco pueden convertirse en bomberos, policías locales, autonómicos o nacionales, pertenecer al ejército ni ser funcionarios de prisiones, como tampoco piloto comercial.